El 8 de marzo celebramos el Día Internacional de la mujer, una fecha única para reivindicar el papel de la mujer en todos los campos de conocimiento humano, incluyendo la medicina. Por eso en nuestro post de hoy queremos hacer un recorrido por la historia de las mujeres en la medicina a través de sus grandes pioneras. ¿Nos acompañas?

Mujeres en la medicina

La primera mujer dedicada a la medicina de la que ha quedado constancia fue Metrodora, una médica griega cuya existencia se encuentra entre los  años 200 y 400 d.C. Es conocida por ser autora del libro de medicina más antiguo escrito por una mujer: Sobre las enfermedades y las curaciones de la Mujer. El libro fue citado frecuentemente en la antigüedad y también en la Europa medieval.

La primera mujer médica en los EE.UU. fue Elizabeth Blackwell, que se graduó en la universidad médica de Ginebra de Nueva York en enero de 1849, y también cofundó la enfermería de Nueva York para mujeres y niños. Blackwell empezó su carrera como profesora  pero terminó decantándose por la medicina tras la muerte de un amigo.

Rebecca Lee Crumpler fue la primera médica afroamericana (un doble hito para la época), y obtuvo su título en la  que ahora se conoce como la Universidad de Boston en 1864. Practicó en Boston por un tiempo, antes de pasar a Richmond, después de la guerra civil. Allí cuidó de los esclavos liberados que no tenían acceso a atención médica.

Tal vez una de las mujeres más conocidas en el mundo de la medicina sea Clara Barton. Barton, nacido en 1821, fundó la Cruz Roja de Estados Unidos en 1881 después de atender a los soldados durante la Guerra Civil.

Entra las mujeres que han recibido el premio Nobel destaca Gertrude Belle Elion, que lo ganó en 1988. Esta química desarrolló hasta 45 tratamientos para combatir el cáncer, incluyendo el Purinethol, el primer fármaco importante para luchar contra la leucemia. Otra fue Rosalyn Yalow, física médica y ganadora del Nobel de Fisiología o Medicina en 1977 por desarrollar el RIA (radioinmunoensayo), una técnica utilizada para medir la concentración de antígenos en el cuerpo. La técnica hace posible escanear las donaciones de sangre para las enfermedades infecciosas, como el VIH / SIDA o la hepatitis.

La contribución de las mujeres en la  medicina no puede abarcarse en un simple artículo de blog. ¿Conoces más mujeres con un papel destacado en este ambiente? Compártelo en los comentarios.