23 enero 2017

La impresión de órganos humanos en 3D

La impresión de órganos humanos en 3D encabeza los avances médicos en la actualidad. De desarrollarse por completo, esta técnica podría suponer un avance inaudito en el terreno de la salud, ya que podríamos llegar a prescindir de donaciones, pudiendo obtener órganos capaces de adaptarse por completo al propio donante.

Entre las acciones que ya se han llevado a cabo en este sentido, científicos norteamericanos ya han implantado diversos órganos en animales, comprobando que su funcionamiento es correcto. Estas estructuras cartilaginosas, óseas y musculares maduran una vez son implantadas, consiguiendo integrarse en el organismo de manera natural, hasta realizar las funciones normales de un órgano original.

Ventajas de la impresión de órganos humanos en 3D

El principal beneficio de los órganos impresos en 3D es que pueden ser modificados de manera que se adapten por completo al organismo del receptor. Las donaciones buscan que un órgano externo se adapte al nuevo organismo, sin embargo en algunos casos el órgano es rechazado por diferentes motivos.

Otra ventaja fundamental es que gracias a este tipo de técnica no será necesario esperar donantes, sino que se podrán fabricar órganos a demanda, acortando los plazos en gran medida. La impresión es casi instantánea, por lo que podemos tener el tejido que necesitamos al momento. Una vez fabricado se implanta de la misma manera que lo haríamos con un órgano donado.

Es cierto que, de momento, los experimentos han sido llevados a cabo en animales y todavía no se cuenta con los medios necesarios para aplicar esta técnica en humanos, sin embargo los exitosos casos de prueba llevados a cabo en animales permiten prever los resultados en humanos en un futuro no muy lejano.

En Estados Unidos se plantea la posibilidad de probar estas nuevas técnicas en el Instituto de Medicina Regenerativa de las Fuerzas Armadas estadounidenses, una asociación que investiga nuevas fórmulas de curación y regeneración de órganos, aplicadas a soldados del país.

Los retos a los que se enfrentan los científicos es la posibilidad de optimizar la tinta de base acuática que sostiene las células que componen el órgano, además de desarrollar infinidad de microcanales que recorren el órgano en su parte interna con el objetivo de oxigenarlo.

En el futuro veremos todo tipo de aplicaciones basadas en la impresión de órganos humanos en 3D, si bien es de esperar que este tipo de práctica se pueda aplicar a todo tipo de fines médicos.